un cuero extraordinario.
Para este producto, utilizamos piel auténtica de plena flor, hecha a mano sin intervención de ninguna máquina. Originaria de Argentina o Brasil, ha sido seleccionada entre el 5% de la mejor producción mundial. La coloración "anilina" se obtiene de manera tradicional, en un baño de colores naturales, sin el uso de pigmentos artificiales. Este acabado permite a la piel patinar con el paso del tiempo, pero también conservar las auténticas cualidades de la piel: un tacto suave y agradable que evita la transpiración cuando hace calor. Cada piel requiere de 5 a 7 días de trabajo antes de ser colocada a mano sobre la estructura de madera maciza.